Un hormigón poroso se caracteriza por la ausencia de finos lo que le confiere sus propiedades drenantes y adherentes, con elevada capacidad de evacuación de agua.
Los principales usos los que se requiere alta permeabilidad, con un alto grado de porosidad y un buen acabado, como por ejemplo:
- Pavimento de pistas deportivas exteriores. Tenis, Atletismo, Padel, etc.
- Pavimentos de capa de rodadura en los que se requiere cierta resistencia.
- Pavimentos drenantes para aguas pluviales.
- Bases de hastíales o bóvedas de túneles.
- Construcción de parkings al aire libre
- Caminos y cualquier zona en la que se busque hacer un drenaje del agua de lluvia o lavado.
Las recomendaciones de instalación son las siguientes:
- Temperatura de aplicación entre 5ºC y 35 ºC.
- No aplicar con tiempo muy húmedo, con lluvia o con riesgo de heladas.
- Si el material del soporte es muy absorbente se humedecerá previamente.
- El soporte debe ser resistente, estable y limpio dentro de lo posible.
Las principales ventajas del uso de estos pavimentos son las siguientes.
- Menor peso que el hormigón convencional.
- Mejora la adherencia del vehículo al pavimento.
- Reduce el ruido emitido por el paso de vehículos.
- Mejora el drenaje, permite el encauzamiento de aguas pluviales.
- Aporta resistencia. Ideal cuando se requiere capacidad drenante y resistencia a compresión.
- Menor absorción de la luz, mejor visibilidad.
- Menor coste de mantenimiento que un asfalto.